HECHOS VIVIDOS (VII)

Cada día que pasaba

más le absorbía el trabajo,

pues siempre actuaba

como auténtico badajo.

Destacaba en el sujeto referido

constancia, honradez y fidelidad,

motivo por el cual era tan querido

por el conjunto de la sociedad.

De esta forma tan natural

fue escalando importantes puestos,

todos ellos de tipo profesional

también debido a sus buenos maestros.

Cuando alcanzó con su esfuerzo

una gran madurez profesional

le fueron encomendados proyectos

de viajes y otros en la esfera local.

Más adelante también

la intervención directa y personal

en varias empresas de bien

al sujeto le ocasionó no parar.